sábado, 26 de enero de 2008

FUNCIONÓ

La tarde no ha estado mal. Por un momento me he sentido como en el instituto. Esa sensación de que cada día de la semana que pasa es mejor que el anterior culminando en el viernes para volver a empezar en el lunes, donde todo el mundo tiene que hacer el esfuerzo de volver a "coger tono", afinarse, armonizar con el otro, (supongo que aún a costa de desafinarse de lo vivido el fin de semana) para alcanzar el viernes, siendo virtuosos. Si alguien trabaja con un grupo de personas que no las vuelve a ver hasta el día siguiente, no conoce lo que hay más allá de su trabajo sabrá de lo que hablo (o tal vez no).
Una sensación laboral totalmente nueva y muy placentera, si señor.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Pues que suerte a mi los dias me parecen exactamente iguales unos a otros al menos ultimamente tendré que hacer caso a u amigo mio que me dijo una vez:Te aburres? Pon un desquiciado en tu vida

PIR_ADO dijo...

claro que si el que se aburre es el mismo que el desquiciado, vaya leche!!. Yo aburrirme no me aburro fácil.